Industria del plástico, la apuesta de Balluff

La empresa alemana de automatización y control industrial Balluff, y concretamente su subsidiaria en México, está apostando por diversificar sus mercados, aun cuando hoy el 80% de sus clientes están en el sector automotor. La compañía ha iniciado una estrategia de penetración en otros sectores.

En el marco del Día Empresarial de Balluff, en el Institutito Politécnico Nacional (IPN), Antonio Mendoza, gerente general de Balluff México, aseguró que entre los sectores en donde perciben buenas oportunidades de crecimiento está el de energía y metalurgia, y uno de los más importantes es la industria del empaque.

El directivo comentó que hace dos años comenzó esta estrategia de diversificación en el mercado mexicano y se han acercado a empresas como Pepsi, Coca-Cola, las cerveceras y Bimbo, que son industrias en las que ven el mayor potencial.

Jaime Navarro, coordinador de Soporte Técnico de Balluff México, dijo que para la industria del plástico la compañía tiene una amplia gama de soluciones, como en el caso de los troqueles, y están desarrollando controladores portátiles.

Además, ofrecen la tecnología Mold ID capaz de monitorear el uso de los moldes para así asegurar la programación de mantenimiento preventivo y evitar dañar los mismos. Con una torreta de luz inteligente (IO-Link) se puede verificar el estatus de utilización del molde, siendo una señal visual para el operador y personal de mantenimiento. La información es almacenada en un tag de RFID que se ajusta una vez que se ha realizado el trabajo de mantenimiento y se vuelve a ejecutar el ciclo.

Esto ayuda a evitar daños por errores en datos o falta de mantenimiento a los moldes y troqueles: "Es carísimo si se te llega a dañar uno, los tiempos muertos y el impacto que tiene esto en la industria es muy alto. Nosotros tenemos la tecnología y la estamos implementando para todo esto", explicó.

El especialista detalló que otras soluciones para el sector del plástico son los transductores lineales para retroalimentación de posición de moldes, así como para saber la posición del émbolo que provee de plástico a éstos. Los sensores de presión inductivos, capacitivos o interruptores mecánicos para identificar la presión en líneas de aire o hidráulicas, y presencia de moldes, o de salida de material, son otra solución.

Navarro comentó que las industrias de inyección de plástico, empaque, alimentos y farmacéutica requieren de soluciones que involucran señales, que ayudan a hacer más eficiente la producción y al monitoreo de algunas condiciones específicas del proceso, con lo que es posible tomar decisiones de manufactura o de mantenimiento para evitar paros de línea.

"Sucede que hoy todavía algunos de los procesos son manuales, hay muchas empresas que a veces lo hacen con papel y lápiz y la intención es automatizar esa parte, la intención es que los registros no se pierdan, que no se omita información de producción, que sean efectivos los períodos de mantenimiento, alargar la vida de los equipos y a veces con un registro manual se pierde o no se tiene. Con la automatización se tiene esa información de manera certera", argumentó el especialista.

Finalmente, recomendó que las empresas del sector plástico que buscan reducir pérdidas por mantenimiento correctivo, por remanufactura o pérdidas por scrap pueden recurrir a la automatización.