Nuevo diseño de la serie CX, ahora con fuerza de cierre de hasta 4200kN

Krauss Maffei completó el nuevo diseño de sus máquinas hidráulicas CX, con capacidad de fuerza de cierre entre 2.000 y 4.200 kN. Con base en esta nueva propuesta surgieron dos temas clave para tratar: integridad de funciones en el control de la máquina para dimensiones compactas y la obtención de mayor flexibilidad posible para tecnologías como moldeo de fibras. Así mismo, el foco puesto en la renovación del concepto hidráulico se ubica sobre la optimización de la energía de la misma máquina.

"Con la nueva generación de la serie CX, para fuerzas de cierre desde 2.000 hasta 4.200kN, ofrecemos a nuestros clientes una máquina de doble placa especialmente económica y precisa", asegura el Dr. Hans Ulrich Golz, presidente del área de técnicas de moldeo por inyección y gerente de Krauss Maffei.

En total una máquina básica podría mejorar su rendimiento energético hasta un 10%. La unidad de cierre tiene un nuevo diseño aerodinámico, lo cual significa un ahorro de potencial del 40% en el movimiento de cierre. Adicionalmente, el control del movimiento es muy preciso y suave. La universalidad de la optimización eficiente se muestra también en el nuevo concepto de máquina en la moderna técnica IE3, la cual ofrece a través del ServoDrive Bluepower un potencial de ahorro energético entre el 10% y el 40%. Este concepto se complementa con una gestión activa en el almacenamiento.

Otras ventajas resultan en al menos el 25% de ahorro a través de configurar tiempos prolongados de permanencia de los aceites, que se puede lograr a través de un nuevo concepto de filtrado. Menos cizalla significa menos daño para el aceite empleado; esta reducción en el corte se puede obtener por medio de un ajuste en el filtro by-pass del aceite y/o en el sistema de refrigeración.

La CX es desde hace varios años una máquina de doble placa reconocida en el mercado y ocupa menos espacio que los modelos largos de tres placas. Debajo de la unidad de cierre hay disponible un espacio para periféricos y todo tipo de sistemas de expulsión y robots. Novedosas soluciones de automatización integrada siguen esta idea básica, como por ejemplo la conexión de una banda transportadora dentro de la contención de la máquina, lo cual ahorra notablemente el área productiva y los costos.

La emisión de ruido se redujo con el aislamiento adicional en la carcasa y el precalentamiento suave del aceite, que permite una conexión estrecha entre el montaje y el proceso de moldeo por inyección. Los tiempos de mantenimiento y servicio también mejoran.

La nueva CX es la base eficiente para otras tecnologías como espumado físico (MuCell), inyección multicomponente y procesamiento de láminas orgánicas (FiberForm), siliconas (SilcosSet) o duroplásticos (PolySet y DuroSet).