¿Qué se entiende por "dosificación" en el contexto de moldeo por inyección?

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Una de las ventajas imbatibles de los plásticos es su variable perfil de propiedades. Con sustancias aditivas se pueden ajustar de forma específica determinadas propiedades adaptándolas a la aplicación prevista. Ya se trate de las propiedades mecánicas, de la inalterabilidad química o por supuesto, lo más conocido, de los colores.

No obstante, la otra cara de la moneda la constituye el hecho de que, debido a la enorme diversidad de materiales para la industria extractiva, cada vez ha ido siendo menos rentable satisfacer todos los deseos de los clientes. Además, las cantidades individuales requeridas han ido disminuyendo. Por otro lado, las empresas transformadoras se hallan ante el problema de tener que satisfacer en tiempo mínimo los deseos de sus clientes en términos de nuevos productos que cambian cada vez más rápido. Las mezclas de material requeridas a tal efecto pueden comprarlas prefabricadas (compuestos) o bien prepararlas ellas mismas.

Los compuestos preparados pueden no resultar rentables por eventuales recargos exigibles por cantidades mínimas. Además, las posibilidades de cambiar la composición a corto plazo son limitadas.

En cambio, la elaboración del material en las instalaciones propias brinda mayor flexibilidad. A tal efecto se puede elegir entre dos opciones: la fabricación centralizada (manual o automatizada) o bien la elaboración directa en la máquina (automatizada). No obstante, la premisa consiste en que las fórmulas sean exactamente observadas, es decir, que al dosificar los distintos componentes se preste atención escrupulosa a las especificaciones.

Por el contrario, las ventajas prevalecen en la elaboración automatizada del material en la máquina. Aquí, la elaboración del material puede llevarse a cabo a corto plazo y en función del pedido, las modificaciones de las fórmulas pueden efectuarse de forma rápida y sencilla, los resultados son rápidamente visibles. Los restos que puedan quedar suelen ser mínimos. Además, las fórmulas son fáciles de repetir.

La función general de la dosificación consiste en unir dos o más componentes en la proporción correcta. Estos pueden presentarse como granulado, polvo, pasta o líquido. Independientemente de la forma del material deben observarse ciertos principios básicos. De este modo, el principio procesual básico de un equipo dosificador estriba en que un "órgano dosificador" retira de un depósito de reserva el material a dosificar y lo pasa a un punto de recogida. El "órgano dosificador" es el dispositivo con el que se "miden" los componentes. Por lo tanto le corresponde una especial relevancia, ya que de él depende gran parte del resultado de dosificación.

Qué órgano dosificador es el adecuado dependerá de las "características del producto a granel", es decir de la forma del material y de las propiedades del mismo. En el moldeo por inyección, lo primero que se tiene en consideración son los órganos dosificadores para sustancias sólidas. Es decir, por forma de material cabe referirse principalmente a granulados y microgranulados, así como al polvo.

Por propiedades del material se hace alusión en particular al comportamiento de flujo. El polvo puede ser suelto, fluidificable o adherente. El granulado puede ser duro o deformable plásticamente, así como frágil. El material de molienda presenta en la mayoría de los casos una estructura irregular y suele poseer un mayor contenido en polvo.

Los sinfines dosificadores están considerados como los órganos dosificadores por excelencia. Otras configuraciones son los dosificadores de cono, dosificadores de discos, correderas de dosificación, dosificadores de cámara o esclusas de rueda celular. Por cierto, un órgano dosificador que debería resultar a todos conocido es el vaso dosificador con el que se miden los ingredientes para hacer un bizcocho, ¡dicho sea de paso!

Ahora bien, únicamente un aspecto resulta decisivo para todas las aplicaciones: ¡la precisión de dosificación debe ser exacta!

Anticipándose a las próximas ediciones, mo llama desde estos momentos la atención sobre el hecho de que en los dosificadores cabe distinguir entre sistemas volumétricos y gravimétricos, y que la mezcla de los componentes desempeña un papel importante.