En un esfuerzo para que los hacedores de políticas en Washington escuchen directamente las preocupaciones colectivas de la industria plástica, el tercer sector más grande de manufactura de los Estados Unidos, líderes de la industria de ocho diferentes asociaciones plásticas se reunirán con miembros del Congreso y sus consejeros en una serie de reuniones oficiales que se celebrarán el 24 de julio.
Las asociaciones plásticas que participarán en esta iniciativa son el Concejo Químico de Estados Unidos (ACC), la Asociación de Fabricantes de Moldes de Estados Unidos (AMBA), la Asociación Internacional de Distribuidores de Plásticos (IAPD), la Asociación de Tuberías Plásticas y Coyunturas (PPFI), el Instituto de la Tubería Plástica (PPI), la Asociación de Comercio de la Industria Plástica (SPI), el Instituto del Vinilo (VI) y la Asociación de Plásticos del Oeste (WPA).
La presencia simultánea de estos grupos líderes de fabricantes de soluciones plásticas les permitirá a los subsectores individuales decirle al congreso sus preocupaciones específicas, al tiempo que sus números combinados demostrarán la importancia de la contribución de la industria plástica en la economía de los Estados Unidos.
En 2011, el último año del que se tiene información consolidada, la industria plástica de Estados Unidos generó 380.400 millones de dólares en exportaciones, lo que representa un aumento de 12 por ciento con respecto al año inmediatamente anterior. Empleó directamente a casi 900 mil personas en casi 16.300 instalaciones, con presencia en todos los estados. Aproximadamente, 33.700 trabajos de la industria fueron adicionados desde el final de 2009.
En términos de valor de comercio, las exportaciones en 2011 de la industria plástica llegaron a 58.600 millones de dólares, lo que significa un balance positivo en comercio cercano a los 16.300 millones. El sector plástico ha probado ser resilente desde el punto de vista económico, mucho más que otros sectores del sector manufacturero, después de la desaceleración económica de 2009, año desde el que el sector manufacturero ha liderado al país.
“Es crucial que la industria plástica en su totalidad les demuestre los retos del negocio y las dificultades económicas que enfrentamos a aquellos que pueden realmente hacer algo al respecto: Los miembros del Congreso. Cuando una simple ley o propuesta puede acabar con el negocio de las compañías y quitarles sus empleos a los trabajadores, nos debemos sentir proactivos en la comunicación de nuestras preocupaciones de nuestra industria, ya que tiene un impacto tan positivo en nuestra economía. Aunque la SPI proporciona coordinación logística, el evento es un esfuerzo conjunto de las ocho asociaciones, lo que demuestra cómo cooperamos conjuntamente en la industria”, dijo William R. Carteaux, presidente y CEO de la SPI.
“Aunque la fabricación en general y los plásticos en particular han ayudado a liderar la recuperación económica en Estados Unidos desde 2009, nuestros miembros nos dicen que aún hay mucha incertidumbre para poder hacer decisiones críticas sobre el futuro. Para poder sustentar expansiones duraderas, la política económica general de Estados Unidos debe proporcionarle a la comunidad de negocios la seguridad necesaria para estimular la confianza, la inversión, el crecimiento y la creación de puestos de trabajo. Ese es un mensaje clave que los líderes de la industria les llevarán a los miembros del Congreso, el 24 de julio”, agregó Jon Kurrle, vicepresidente senior de gobierno y asuntos industriales, de la SPI.
“Nuestros productos proporcionan muchos beneficios, desde la preservación de los bancos de sangre de nuestra nación hasta la reducción del consumo energético, para minimizar la dependencia de los Estados Unidos de otros países petroleros. Nos complace trabajar con la completa industria plástica para crear un marco de trabajo que avance las industrias de manufactura, uso y reciclaje responsable de los productos de nuestra industria”, dijo Richard Doyle, presidente y CEO del Instituto del Vinilo.
Los participantes de estas discusiones llegarán a Washington la tarde del 23 de julio. El día 24 comenzarán con un desayuno en el que se mirarán los aspectos generales de la industria, seguido por reuniones con oficiales administrativos. Después del almuerzo, los líderes de la industria se trasladarán a los edificios del Senado y la Cámara de Representantes, para sus respectivas reuniones con miembros del Congreso. Habrá una recepción con miembros del Congreso y otros invitados.