El Instituto Tecnológico del Plástico AIMPLAS y AIMME (Instituto Tecnológico Metalmecánico) acaban de completar con éxito el proyecto GALVAPLAST, que ha consistido en la utilización de la nanotecnología en los procesos de metalización por electrodeposición galvánica de materiales plásticos para mejorar a nivel superficial las propiedades conductoras de éstos, mediante su formulación con carga de nanotubos de carbono.
Las piezas realizadas con estas nuevas formulaciones permitirán la reducción de pasos y etapas de metalizado, favoreciendo el ahorro de costos y la minimización de los residuos generados. Adicionalmente, se ha observado una mejora en las propiedades conductivas del sistema base plástica/recubrimiento metálico.
El proyecto, finalizado en diciembre pasado, se desarrolló durante dos años. En la primera anualidad se llevaron a cabo los estudios de búsqueda y selección preliminar de las matrices termoplásticas más adecuadas así como la formulación de cargas y aditivos para mejorar las propiedades tras la deposición galvánica. Se formularon compounds aditivados en base polipropileno (PP) y en base policarbonato (PC)+ABS de los que se realizó su caracterización mecánica.
Con esta tarea se evaluó inicialmente la influencia que la adición de los nanotubos de carbono podía tener en el comportamiento mecánico de los materiales seleccionados. En este segundo año se ha continuado con la reformulación y optimización de los compuestos termoplásticos a partir de los resultados de las pruebas preliminares realizadas por AIMME con los baños de deposición galvánica. De este cruce de resultados entre ambos centros se han identificado aquellas formulaciones termoplásticas que favorecen las propiedades conductivas y de apantallamiento EMI, principal objetivo del proyecto.
A través de este proyecto se ha pretendido aprovechar las sinergias y conocimiento de AIMPLAS en el campo de los compuestos termoplásticos y de AIMME en los métodos de metalización, para asegurar la consecución de los resultados previstos..