¿Podría el reciclaje químico ser la solución?

Tuve el privilegio de asistir a la primera Cumbre Latinoamericana de Innovación en Envases Plásticos, que se llevó a cabo el 1 y 2 de marzo en Ciudad de México. Este evento, organizado por nuestra casa editorial Carvajal Medios B2B, cumplió con la meta que nos habí­amos propuesto: reunir en el mismo escenario a verdaderas autoridades en temas que determinan el rumbo de la innovación y darle a América Latina un evento sin precedentes en calidad y profundidad de contenido. Contamos en esta primera versión con 353 participantes, de los cuales el 27% vinieron de fuera de México.

En las presentaciones hubo varios temas que se tocaron de manera recurrente y se habló de tendencias que marcarán el desarrollo futuro de la industria de transformación de envases plásticos. Quiero dedicar este espacio a difundir 10 mensajes que los conferencistas nos dejaron.

1. Existen grandes tendencias que cambiarán la industria de los envases. Una de ellas es el Internet de las Cosas (IoT, por su sigla en inglés). Ahora los empaques se definen como un producto compuesto, donde un 40%-50% es el envase en sí­ mismo y el porcentaje restante es información en la nube que estará conectada al envase.

2. Otra de las tendencias que marcará el rumbo en la innovación de envases es el cambio demográfico. En 30 años nuestra sociedad será diferente, con un porcentaje mucho más representativo de personas mayores. Los empaques no frustrantes jugarán un rol principal.

3. La sustentabilidad en los envases ya no es un opcional. Las mujeres millenials, quienes tomarán las principales decisiones de consumo en un futuro muy cercano, dan prioridad al factor medioambiental.

4. El envase no sirve solamente para contener un producto. El envase debe generar una reacción emocional y crear un ví­nculo entre el consumidor y el producto. En palabras de Jorge Maquita: "un buen envase protege tu producto, un envase excelente protege tu marca".

5. Existe un matrimonio entre el producto, el envase y el consumidor. Si no consideramos alguno de estos factores a la hora de innovar, algo va a fallar. Es necesario pensar bien qué función va a cumplir el envase, cómo podemos fabricarlo y qué es lo que espera el cliente. Si el cliente no entiende el por qué de una innovación, no va a pagar por ella.

6. La transparencia es una tendencia importante en los envases. El consumidor sigue pensando que la transparencia se asocia a pureza y a confianza. Por tanto, aplicar la regla de tener la mayor cantidad de producto visible en un envase va a ayudar a la venta.

7. La personalización es también una gran tendencia en el desarrollo de los envases. Los usuarios quieren tener una experiencia con el envase y sentir que pueden tener algo a su medida. Es importante que los envases permitan a los usuarios tener esta flexibilidad, porcionar los productos consumidos y tomar diferentes opciones para diferentes estilos de vida.

8. El proceso de innovación requiere especialización. Es mejor centrarse en uno o dos proyectos, como máximo, y darle celeridad a su ejecución. La velocidad es un factor clave.

9. Innovar es un proceso. No es una tarea puntual que se ejecuta con un impulso, sino que es parte del ADN de una empresa. El proceso de innovación requiere una vocación continua y un compromiso desde las directivas de la empresa.

10. Equivocarse no es fallar. Equivocarse es algo natural e inevitable del proceso de innovación y no es lo mismo que haber fracasado. Fracasar es dejar de intentar. El mayor limitante para innovar es el miedo. Si no aplicamos nuestras ideas, tendremos que pagar por ellas después a alguien más que sí­ las aplicó.

Por último, quiero agradecer sinceramente a los conferencistas y asistentes que nos acompañaron en este evento, y que aportaron su visión y pasión para hacer de esta primera versión de nuestra cumbre todo un éxito.