Un empaque que le "cambia la cara" a la leche

El equipo de Fairlife LLC no se percibe a sí mismo como una empresa lechera. Por lo tanto no querían entrar al mercado con un empaque convencional. La marca fue diseñada con ayuda de la firma de estrategia y diseño Kaleidoscope, con sede en Chicago, y con la ayuda de los expertos en botellas Plastic Technologies Inc., de Ohio.

El resultado es una botella icónica que busca revolucionar la experiencia de los clientes. Alex Weber, director creativo senior de Kaleidoscope, afirma que "si pones el mismo empaque viejo, nadie va a notar la diferencia. Desde el principio estás generando una disrupción y los estás haciendo reconsiderar; además la forma de la botella era crítica para esto".

La leche viene en contenedores de PET de 52 onzas y de 11,5 onzas, con una etiqueta encogible de cuerpo entero que ayuda a proteger la leche de la degradación que ocurre cuando se expone a la luz. La vida de anaquel alcanza los 100 días.

El empaque está diseñado para generar una relación con el cliente. "Atrás están los días en que se buscaba proyectar una imagen. La relación se trata del diálogo, basado en compartir valores que permitan ganar confianza uno en el otro", afirma Steve Jones, CEO de Fairlife. "Todo lo que hicimos era llamar la atención con esta nueva botella, de tal forma que la gente reconsiderara la posición de lo que está adentro", concluye.