Un reciente estudio, titulado “Valor energético y económico de los Plásticos No Reciclados (NRP) y de los Desechos Sólidos Municipales (MSW) que en la actualidad están en rellenos sanitarios, en los 50 estados”, adelantado por el Centro de Ingeniería de la Tierra (EEC, por su sigla en inglés) de la Universidad de Columbia, Estados Unidos, y patrocinado por el Concejo de Química de América (ACC), afirma que si todos los plásticos no reciclados que actualmente se envían a los rellenos sanitarios de Estados Unidos fueran convertidos en energía, usando las tecnologías disponibles en la actualidad, podrían proporcionar suficiente energía para movilizar seis millones de automóviles.
“Los plásticos tienen un valor energético significativamente más alto que el carbón. Capturar ese valor energético de los plásticos no reciclados (y de los desechos sólidos municipales, en general), tiene mucho sentido, porque proporciona una buena forma de energía doméstica, al tiempo que minimiza el impacto en el medio ambiente”, dijo el profesor Marco J. Castaldi, del Departamento de Ingeniería de la Tierra y el Medio Ambiente, de la Universidad de Columbia.
El estudio también estima que si todos los plásticos no reciclados que son enviados a los rellenos sanitarios de Estados Unidos, anualmente, fueran llevados a fábricas modernas de conversión de desechos en energía, podrían producir 52MWh millones de electricidad, suficientes para abastecer 5,2 millones de hogares, al año.
“Mientras que los Estados Unidos buscan fuentes alternativas de energía, investigaciones como esta resultan cruciales para ayudar a identificar dichas alternativas a los políticos”, precisó el Dr. Nickolas Thenelis, director del Centro de Ingeniería de la Tierra, de la Universidad de Columbia.
“Incluso después de su uso, los plásticos continúan siendo un recurso valioso. Cada vez que sea posible, los plásticos deben ser reciclados, pero cuando no lo son, existe todavía una gran oportunidad de recuperar la abundante fuente de energía para abastecer nuestros hogares, vehículos y negocios”, dijo Steve Rusell, vicepresidente de plásticos del Concejo Químico de América, entidad que agremia a las principales compañías del sector químico, principalmente en Estados Unidos, y patrocinó esta investigación.